Desde hace ya 7 años en Germinando desarrollamos el proyecto Laboratorios Experimentales de Ciencia en los centros educativos de Primaria del Distrito de Salamanca (Madrid) como una actividad dentro del horario lectivo para todos los cursos. Por los laboratorios han pasado durante este curso un total de 657 alumnas y alumnos, pertenecientes a los centros CEIP Amador de los Ríos, CEIP Guindalera y el Trilema Avenida de América. El profesorado que ha participado en la actividad ha valorado el proyecto con una nota media de 9 sobre 10 en una encuesta de satisfacción enviada a final de curso. Además, se han recogido algunos comentarios que destacan la elevada motivación que ha mostrado el alumnado, así como el deseo de que el próximo curso se repitan las sesiones y el desempeño de las profesionales que han guiado la actividad a lo largo de estos meses.

Nuestro objetivo en este proyecto es potenciar el pensamiento científico del alumnado, aumentando su motivación en el aprendizaje de las ciencias y mejorando su competencia y destrezas en experimentación. Todo esto partiendo de la premisa de que el alumnado disfrute y se entusiasme haciendo ciencia, sin perder de vista el rigor y su utilidad nuestra vida diaria y como herramienta para la transformación social y ecológica de nuestro entorno.

La idea central es que para aprender ciencia hay que hacer ciencia. Por eso planteamos una propuesta integral basada en la metodología indagatoria, en la que el alumnado no sólo aprende contenidos, sino también los procesos que permiten aceptarlos como correctos y verdaderos. Así, el alumnado de una manera guiada será capaz de diseñar sus experimentos, partiendo de sus inquietudes, haciéndose sus propias preguntas y elaborando sus propios métodos de experimentación. Planteamos una propuesta basada en el aprendizaje colaborativo y significativo, poniendo el aprendizaje vivencial y experimental en el centro.

Tras la celebración del congreso con el alumnado de sexto curso, en el último trimestre se han trabajado diversas propuestas con el alumnado de primero a quinto de Primaria, programadas según el currículo que marca las enseñanzas en las diferentes etapas escolares. Estas han sido las propuestas de este trimestre:

Curso 1º: ¿Cómo son los materiales que nos rodean?

A lo largo de esta sesión, y partiendo de una situación cotidiana disparadora, el alumnado ha aprendido a clasificar materiales según sean líquidos o sólidos con la destreza del pensamiento de comparar y contrastar, para así construir las características que los distinguen. Comenzamos haciéndonos la pregunta de cómo algo que sirve para una misma función (como el jabón) puede ser tanto “líquido” como “sólido”, y nos preguntamos de qué se trata la diferencia entre ambos. Continuamos categorizando algunos materiales como sólidos o líquidos, y todo parecía fácil hasta que aparecieron algunos materiales como la arena o el detergente granulado, que actuaban como líquidos en gran cantidad, pero al verlos con la lupa pudimos comprobar su estado sólido.

Curso 2º: ¿Cómo se juntan las sustancias?

seguimos trabajando con la materia en sus diferentes estados y aprendimos lo que son las mezclas homogéneas y heterogéneas. A través de la rutina de pensamiento “observo-pienso-me pregunto” el alumnado se ha familiarizado con el concepto de mezcla y sus diferentes tipos. Nos hemos preguntado ¿qué componentes tiene la mezcla? ¿Cuántas partes veo? ¿cómo las distingo? Hemos analizado sus características físico-químicas y visto cuáles de ellas nos pueden permitir separar sus componentes. Disfrutamos realizando nuestras propias mezclas de sustancias y después reflexionamos sobre las mejores formas de volver a separarlas y qué instrumentos podemos utilizar para ello.

Curso 3º y 4º: ¿Qué características tienen los artrópodos?

aprendimos sobre la biodiversidad de los artrópodos, de su importancia en los ecosistemas y su preocupante pérdida de especies. A partir de diversas fotografías de artrópodos el alumnado observa y recoge meticulosamente las principales características que definen a cada uno. Después, a través del método inductivo, clasificamos como lo hace la taxonomía, la muestra de artrópodos en función de los caracteres observados, agrupando según las características comunes, yendo de lo global a lo particular hasta llegar a lo más específico. Finalmente, con muestras de artrópodos de nuestro entorno y lupas, el alumnado identificó las principales características de su grupo biológico y su importancia ecológica.

Nos sorprendimos con algunos de los ejemplares que parecen ser una especie y acaban siendo otra camuflada, como es el caso de los sírfidos, que de apariencia parecen avispas pero resultan ser dípteros, el orden al que pertenecen las moscas. Dejamos atrás el término “bichos” para englobar a los insectos y vimos los distintos órdenes en los que se dividen éstos, tales como los coleópteros, ortópteros, odonatos, lepidópteros, himenópteros, dípteros y hemípteros.

Curso 5º: ¿Por qué la vela flota?

A partir de la observación de dos trozos de vela en líquidos de diferente densidad, el alumnado propuso hipótesis sobre los factores que afectan a la flotabilidad. A lo largo del taller el alumnado ha ido diseñando sencillos experimentos que permiten identificar cuál es la variable que afecta a la flotabilidad. Una vez hecha la puesta en común de todos los experimentos se realizó una explicación teórica sobre la flotabilidad y el principio de Arquímedes, que da sentido a los experimentos realizados, siguiendo la metodología Flipped Class.