El proyecto de ciencia ciudadana Resilvestra da un paso más con el reparto de plantel entre las personas que participarán en la investigación científica que analizará las potencialidades del cultivo y consumo de plantas silvestres comestibles. En concreto, la iniciativa quiere explorar sus posibilidades productivas y nutricionales y contribuir así, tanto a la mejora de la resiliencia climática de los agroecosistemas madrileños, como a la diversidad en nuestra dieta. El reparto se realizó en dos jornadas en el mes de abril gracias al apoyo del Real Jardín Botánico en Madrid y el Centro Comarcal de Humanidades Sierra Norte de La Cabrera. 200 personas ya están cultivando cerca de 1.000 plantas de verdolaga, colleja y jaramago blanco o rúcula silvestre.